57
En 2021, la empresa intentó pasar a producir cubos a partir de botellas de plástico recicladas, pero dos años después, la dirección informó de que esta producción provocaba un aumento de la huella de carbono de Lego.
La búsqueda de los materiales más sostenibles para los juguetes (ya se han probado más de 600) debería traducirse en una reducción del 37% de las emisiones nocivas de aquí a 2032. Y la rSEBS da esperanzas de que Lego va por buen camino.