La NASA estudia la posibilidad de utilizar setas para construir viviendas en la Luna y Marte. La seriedad de los planes queda convencida por la inversión de 2.000.000 de dólares en este proyecto de «setas». Un grupo de científicos del Centro de Investigación Ames participará en el desarrollo.
El elevado coste de enviar al espacio materiales de construcción tradicionales ha obligado a la NASA a estudiar el asunto. Enviar esporas de hongos al espacio con su posterior mezcla con regolito y agua resultará mucho más barato. Los científicos esperan que los ladrillos así obtenidos protejan bien no sólo de las temperaturas extremas, sino también de la radiación espacial. Además, cultivar un material de construcción de este tipo puede ser bastante rápido: sólo 1-2 meses.